DISOLUCIÓN DE CONDOMINIO
CONDOMINIO: ¿QUÉ ES?
El condominio es la situación jurídica que se produce cuando la propiedad de una cosa pertenece, proindiviso, a varias personas. Las proporciones se suponen iguales, excepto que la ley o el título de constitución dispongan otra proporción. En las parejas y matrimonios, lo más común que se tenga en comunidad es la vivienda o domicilio familiar.
LA DISOLUCIÓN (LIQUIDACIÓN, EXTINCIÓN) DE CONDOMINIO.
Entre los derechos de los codueños está el de poner fin a esa comunidad en cualquier momento. No obstante, es válido el pacto de conservar la cosa indivisa por tiempo determinado, que no exceda de diez años.
Si la cosa es indivisible, por cuanto la división la convirtiera en inservible, cualquiera de los codueños puede pedir adjudicársela o venderla. Cualquiera de las opciones se producirá siempre que exista acuerdo. Si se opta por adjudicársela deberá pagar el precio al copropietario de la parte adquirida y si opta por venderla, el dinero obtenido se repartirá entre todos los codueños en función de su cuota de participación.
Para disolver el condominio hay dos vías. La extrajudicial si existe acuerdo y la judicial cuando no lo hay.
El efecto principal de la extinción de condominio es que cada porción se individualiza. Por ejemplo, si antes éramos copropietarios por mitad y en proindiviso de un inmueble (cada uno tenía un 50%), tras la acción de disolución de condominio, ahora, cada uno, tendrá el 100% de su mitad.
Aun la partición, continuarán de modo indivisible las hipotecas constituidas sobre el mismo. Por lo anterior es común que cuando en un divorcio uno de los cónyuges se adjudica la mitad del otro, el precio pagado por la adjudicación de la otra mitad quede reducido, si no compensado totalmente, por la carga que va unida y que también se adjudica.